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El cine de animación triunfa en cartelera

Frozen, Gru, Monstruos S.A o Toy Story lideran las listas de películas más vistas en los últimos años. La animación va en ascenso y el cine español es cuna de grandes talentos en esta industria.

“Frozen: El reino de Hielo” acaba de convertirse en la película animada más taquillera de la historia del cine. Desde diciembre de 2013, el film ha recaudado más de 1072 millones de dólares en todo el mundo, sobre pasando la marca que ostentaba “Toy Story 3”. Frozen que obtuvo recientemente 2 Oscars a mejor película de animación y a mejor canción se ha colado en el Top 10 de las películas más vistas de todos los tiempo, hecho que constata el buen momento por el que pasa el mundo de la animación.

En el cine lo importante es la historia que se cuenta ,no el público al que se dirige. Es imprescindible que una historia entre en el corazón, se cuele en el alma y se quede por siempre en nuestra memoria. El contenido emocional es lo que baja por el brazo, sale por las manos y termina en el papel, diseñando esos muñecos estáticos que acaban cobrando vida.

El reinado de Disney

Hablar de animación es hablar de la Historia Norteamericana, hablar de Nueva York en los años 20 y hablar, obviamente, de Disney. Tras la II Guerra Mundial Disney se dedicó a todo tipo de cine y en los momentos de dificultad decidió economizar e iniciar la producción de dos películas en modo de prueba. Esas dos películas fueron “Dumbo” y “La Cenicienta” que cosecharon un enorme éxito. A esos dos títulos les siguió “Alicia en el País de las Maravillas” y “Peter Pan”, films que marcaron nuevos tiempos para la compañía americana.

“La Bella Durmiente” en 1959 marcó el final de una era en los estudios Disney, pues fue la última película dibujada totalmente a mano, un proceso enormemente costoso que se vio sustituido en “101 Dálmatas” por otro mucho más barato, aunque menos creativo.

A lo largo de los años, el cine de animación ha conocido un desarrollo sin precedentes. La caída del telón de acero logró que mucho animadores de los países del este pasaran por todo el mundo aportando su experiencia mientras que en Estados Unidos, Disney continuaba con su momento de esplendor con películas como “La Sirenita” o “La Bella y la Bestia”.

Aún así, Disney tuvo un momento de decadencia con la llegada de Pixar, una pequeña y desconocida empresa de infografía experimental que paso a convertirse en la productora de animación más importante del mundo. Sus creaciones pasan por títulos como “Toy Story”, “Bichos” o “Monstruos S.A”. En 1991 Pixar y Disney unieron fuerzas y desde entonces son muchos los largometrajes que ha hecho en común.

España, cuna de grandes talentos

El monopolio del cine de animación es sin duda para Estados Unidos pero desde hace varios años el cine europeo lucha por hacerse un hueco en este complicado terreno. Aunque ya el cine español de la posguerra contaba con excelentes animadores como los creadores de la reconocida familia “Telerín” y su mítico “Vamos a la cama”, el éxito que han cosechado películas como “El Bosque Animado”, “Pocoyo” o el reconocimiento internacional que tuvo “Planet 51” convirtiéndose en la película de animación más vista en el año 2009, hacen que el futuro nacional de esta industria sea cada vez más esperanzador.

“Lamentablemente, en España hemos tenido muchos años en los que el cine infantil era algo pasado de moda, a diferencia de los que sucedía en Francia o Alemania donde las ayudas institucionales al dibujo animado son extraordinarias”, aclara Fernando de Miguel, secretario de la Asociación Española de Productores de Animación. “Mucha gente desconoce que aquí se han rodado varias películas de Asterix o teleseries como Los Picapiedra durante los años 60”.

Tal y como también admite el Director de la Semana del Cine de Valladolid, Javier Angulo, en España no hemos sabido vender bien nuestro cine. “Los yankees han sabido coronarse como los reyes del séptimo arte y ellos no inventaron el cine, inventaron el negocio del cine”.

Disney y Pixar, Pixar y Disney, son y serán los referentes en el cine de animación, pero lo cierto es que en este sector existe un futuro de una calidad impresionante y que puede triunfar sin la necesidad de llevar un sello o la silueta de ningún ratón en su portada.